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La realidad de la lluvia

por Karen Morena

NOTA: Espero estimado lector desde el fondo de mi corazón que dentro de las películas que has visto, esté Parásito, de lo contrario, sugiero, deje esta columna para leer después de ello, contiene información que devela el secreto de una gran película que no quisiera dañarte.

Mi columna el día de hoy aborda la lluvia, el agua, su importancia e impacto en la vida de todos, en agosto de 2023 he vivido la lluvia de manera diferente este año, esta vez comprendí la importancia y el impacto de ella y aunque no lo pensamos seguido, todo está conectado.

Por eso te pregunto querido lector. Esperar que llueva para dormir bien o suspirar que no llueva para poder dormir ¿Cuál es tu deseo por la noche?

Hay una escena en Parásito que se da en un carro, después de una noche lluviosa, allí el conductor que vive en un barrio pobre que se inunda escucha a su jefa celebrando la bendición que fue la lluvia que acaba de pasar. Y hasta hoy, esa había sido una escena chistosa.

Tengo que confesar que, si algo me ha entregado la vida con la edad, es perspectiva, en otro momento, no entendí la relevancia de ciertas cosas, pero sobre todo con los años no entiendo el desinterés de las personas por el bienestar común, cómo pasamos a estos círculos egoístas en donde el otro, – en palabras de la chica de la selección Colombia – “vale culo y medio”

Cuando digo que todo está conectado, me refiero sobre todo a lo que parece que no, la basurita que se tira en la calle y tapa la alcantarilla que luego ocasiona una casa inundada, el lote invadido deforestado poco a poco que luego, permite que los vendavales se lleven las tejas de las casas, el humedal que alguien rellena con escombros que luego, desborda la ciénaga.

Esperar la lluvia para regar los cultivos, aun cuando en la noche no se puede dormir bien por las goteras y terror constante de que se inunde la casa y se dañen los enseres.

La lluvia se conecta además con la salud mental, no hay psicólogo, psiquiatra que pueda curar los nervios del hecho de que somos animales y ante la intemperie estamos indefensos, no hay estrato que te salve de ello.

Les cuento un caso, Ana María* estrato 5 en Barrancabermeja tiene una cúpula en su sala que con las últimas lluvias se cayó y la casa se inundó, la siguiente semana tanto su familia como ella no pudieron dormir, pensando en qué momento inicia la lluvia, al punto de tener que mudarse, pero, ¿estamos de acuerdo todos no podemos mudarnos por “una lluviecita”? Esa es la dura realidad a la que se enfrentan los más pobres. Esto por causas de una fuerza invisible, la inequidad, quiero decir que coincido con el capitalismo, con lo que no puedo es con los empresarios y políticos de medio pelo que se roban el gasto público y las condiciones de vida de los más pobres.

Por eso te pregunto: Esperar que llueva para dormir bien o suspirar que no llueva para poder dormir ¿Cuál es tu deseo por las noches?

*Los nombres han sido cambiados para proteger la identidad.

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