Camilo Andrés Campos, de 31 años, e Iván Leonardo Ardilla Caballero, de 32 años, perdieron la vida de manera trágica al ser atropellados por un ‘carro fantasma’ en la carretera federal Tonalá, Arriaga, kilómetro 62, México. Estos dos amigos de toda la vida, originarios de Santander, Colombia, tomaron la difícil decisión el 12 de enero de buscar un futuro mejor de manera ilegal fuera de su país natal.
Ambos emprendieron la travesía caminando por el tapón del Darién, lograron llegar a México con la esperanza de cruzar hacia Estados Unidos. Aunque solo llevaban dos semanas en el país, su sueño se vio truncado por el fatal accidente. A lo largo de su trayecto, enfrentaron diversas dificultades, incluyendo accidentes que resultaron en lesiones para Camilo, quien sufrió una lesión en el hombro, y para Iván, quien tuvo problemas en la muñeca.
Los familiares en Colombia comentaron que los accidentes fueron una constante en su viaje, incluyendo un accidente de autobús en Costa Rica, entre otros contratiempos. A pesar de las adversidades, mantenían la esperanza de alcanzar el sueño americano. Cristina Ardilla, una familiar, compartió:
“La idea de ellos era llegar a Estados Unidos por el supuesto sueño americano. Desde el inicio tuvieron varios accidentes. Iban en un bus y el señor perdió el control y se estrellaron, eso sucedió en Costa Rica, fue una travesía bastante atravesada, y en México ocurrió la tragedia. Llevaban una semana, menos de 15 días, la idea era atravesar la frontera”.
Los allegados de los colombianos especulan que el accidente pudo haber sido premeditado, considerando la presencia de bandas dedicadas a la trata de personas en México.
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