El pasado miércoles 30 de octubre, en el colegio de la vereda Santa Teresa de Puerto Wilches, Santander, un grupo de personas organizó una celebración para los niños en vísperas de Halloween. Durante el evento, se ofreció un variado menú que incluía arroz con pollo, helados, dulces, una bebida tradicional conocida como «cubana», agua, gaseosas y torta.
La comida fue servida alrededor de las 12:00 p.m., en medio de las actividades festivas que buscaban brindar un momento de alegría a los niños y adultos presentes. Sin embargo, horas después del consumo, se comenzaron a reportar problemas de salud.
A partir de las 3:00 p.m., muchos de los asistentes empezaron a experimentar fuertes malestares estomacales, incluyendo náuseas, vómito y diarrea. Lo que inicialmente fueron casos aislados, rápidamente escaló, afectando a un total de 48 menores de edad y 10 adultos, quienes sufrieron síntomas de intoxicación aparentemente debido a algunos de los alimentos consumidos durante la fiesta.
Las autoridades locales están investigando la causa exacta de la intoxicación, con el objetivo de determinar qué alimentos o bebidas pudieron haber estado contaminados y evitar futuros casos similares.