Ingry Araselly Torres Recalde, era una de las concursantes de la Chicamocha Canyon Race, pero nunca llegó a la meta y habría rodado por un abismo de 700 metros.
La deportista de Ipiales – Nariño, había desaparecido el pasado domingo 3 de junio mientras participaba en la competencia deportiva y fue encontrada muerta el pasado lunes 4 de junio en la vía que conduce de La Palmita al sector de San Pedro, departamento de Santander.
De acuerdo con la información suministrada, la mujer salió el domingo a las 6:00am con rumbo a La Perla del Fonce, sin embargo la mañana pasó, el sol se ocultó y los atletas, provenientes de todas partes del mundo llegaron a la meta, pero la participante número 205 nunca llegó a su destino.
Torres Recalde no se comunicó con sus familiares, los botones de alerta y de abandono de la competencia entregados a cada participante no fueron activados, tampoco llegó al hotel, por lo que los organizadores del evento activaron el plan de contingencia, coordinado con la Policía de Turismo, el equipo logístico y organismos de rescate.
El lunes, tres expertos de bomberos tomaron como referencia un video que fue grabado por la atleta, llegando al sector de La Palmita, y al caminar 200 metros, hallaron, a las 11:30am un bolso, donde se encontraba la cédula, dinero y otros documentos, además unos auriculares y gafas.
El grupo de bomberos siguió el rastro y el apoyo aéreo fue solicitado, pero a las 3:50pm, a dos kilómetros del río Chicamocha, los habitantes del sector hallaron el cadaver de la mujer de 39 años.
La Chicamocha Canyon Race se desarrolló entre el 1 y el 4 de junio y contemplaba distancias de media maratón (21 km), maratón (42 km), 75 km, 116 km y 100 millas.