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Ante la presencia de personas ajenas y armadas a sectores aledaños de los barrios Pozo Siete y Bendición de Dios, líderes comunales hicieron un llamado a las autoridades y organizaciones de Derechos Humanos para que visitaran los territorios amenazados por los extraños, quienes al parecer estarían desarrollando patrullajes nocturnos con pistolas de largo alcance así como exigiendo una cuanta por los ‘servicios’.
Las denuncias
Andrés Ortiz, miembro de la junta directiva de Credhos, aseguró que las personas extrañas y armadas también han estado organizando reuniones privadas donde invitan e indican a la ciudadanía quiénes son y cuáles son las órdenes a seguir según los servicios que están ofreciendo.
“Tuvimos la oportunidad de asistir a una de estos encuentros, el cual finalmente no se concretó por razones que desconocemos. Una de las hipótesis la basamos en la cancelación de la reunión ante la presencia de nuestro equipo de acompañamiento solicitado por la misma comunidad o el traslado del lugar del encuentro por los mismos actores claramente para nosotros no ser testigos del hecho”, expresó Ortiz.
Ante la información que han logrado recopilar los defensores de Derechos Humanos, se resalta el seudónimo de quien al parecer no solo estaría ejerciendo control sobre las comunidades, sino además de quien posiblemente puerta a puerta visita y cobra a los vecinos para que no dejen de asistir a las citaciones que ellos mismos vociferan.
Los ilegales
“Hemos tenido conocimiento de primera mano de alias ‘Pájaro’, quien al parecer estaría a cargo de estas labores de por sí ilegales. Recordemos que el Gobierno Nacional expidió una Ley recientemente donde declara ilegal el paramilitarismo y todas sus formas de acción, lo que demuestra que dichas asociaciones o estrategias de seguridad barrial con armas representan el aparato paramilitar existente y que estos actuares en estos sectores, y que hemos venido denunciando, no son hipótesis de Credhos”, aseguró el miembro de la Corporación de Derechos Humanos Regional.
El temor de la ciudadanía, que fue palpado durante la visita del equipo humano de Credhos, se corroboró ante la presencia de personas extrañas que se movilizaban en motocicleta vigilando los pasos de los funcionarios en el lugar de las denuncias la semana pasada, cuando se programó la reunión que no realizada.
Finalmente el Secretario de la junta directiva de Credhos precisó que, según las comunicaciones establecidas con la comunidad, las personas armadas y encapuchadas se ubican en la parte posterior del barrio para identificar quién ingresa o sale del sector. Agregó además que ya se han establecido las denuncias pertinentes antes las autoridades para que, investiguen y aumenten las rondas de patrullaje en los barrios comprometidos.
