Al as 10:00 de la mañana del pasado domingo 4 de diciembre la familia Samboní Muños alerta a las autoridades sobre la desaparición de su hija, Yuliana Andrea de 7 años de edad. Las autoridades inician la búsqueda de la menor, la cual, mediante cámaras de seguridad del sector, indicaría que fue raptada en una camioneta gris de placas DBO-960 que por allí circulaba una hora antes.
Paso a paso
El vehículo, conducido por Rafael Uribe Noguera (información establecida por las autoridades con posterioridad), es captado en cámaras cuando se movilizaba por el barrio Bosque Calderón y cuando aprisiona a la menor en su casa. La camioneta es vista varias veces en imágenes debido a que el conductor huye por un lugar obstaculizado, siéndole necesario circular por la misma vía donde come el rapto.
Esa misma tarde las autoridades localizan a Laura Arboleda, a quien le comunican que un vehículo bajo su nombre es buscado en un proceso de secuestro de una menor de edad, respondiendo que la camioneta ya no es de su propiedad. Ante este hecho, la mujer comunica a su esposo Francisco Uribe Noguera (hermano del presunto victimario) con las autoridades, comprometiéndose éste a colaborar con el proceso.
Versiones
Testigos durante la tarde de este día, aseguran que vieron ingresar a los hermanos de Rafael Uribe, Catalina y Francisco, al edificio, donde además la hermana discutió con el guardia para lograr su ingreso. También han apuntado que vieron cómo el presunto asesino se asomaba al balcón del apartamento gritando desesperadamente en actitudes extrañas.
Horas más tarde, hacia las 5:00 de la tarde según las investigaciones adelantadas, Rafael Uribe Noguera sale caminando por sus propios medios del edificio, en compañía de su hermano, quien horas más tarde habría establecido comunicación con las autoridades para decirles que había ocurrido una tragedia, pero sin mayores detalles.
Ya en la noche, el hermano y abogado reestablece las comunicaciones con la Policía y les indica la dirección del apartamento familiar (calle 66 con carrera 4) donde agrega haber encontrado a su hermano bajo los efectos de una sobredosis, que por tal motivo lo remitirá a un centro médico.
Según la minuta del registro de la Clínica Cardiovascular Navarra, Rafael Uribe ingresó cerca de las 9:20 de la noche en compañía de sus hermanos, quienes lo hospitalizan en el lugar al parecer por sobredosis con cocaína. El parte médico inicial indicaría que 5 horas antes el victimario habría consumido 3 bolsas del alcaloide.
Las inspecciones
Esa noche las autoridades llegan al edifico Equus 66 ingresando al apartamento 603, donde es hallado el cuerpo sin vida y desnudo de la menor con señales de abuso y tortura.
A las primeras horas del siguiente día, las autoridades establecen comunicación con la familia Samboní Muñoz, quienes confirmaron que la identidad de la menor hallada sin vida en un apartamento de Chapinero Alto corresponde a la de Yuliana Andrea, reportada como desaparecida el día anterior.
Así mismo, las autoridades precisan que Rafael Uribe Noriega, internado en la Clínica Cardiovascular, es puesto en custodia a la espera que un juez de la república le dé orden de captura. En este lugar posteriormente el hombre se le leen sus derechos e informan los motivos de su detención.
¡Justicia!
Esa misma mañana el padre de la menor, Juvencio Samboní, exige un castigo ejemplar para quien haya causado el deceso de su hija. Por su parte la madre, que se encuentra en estado de embarazo, también fue trasladada a un centro médico por la gravedad en su estado de salud como consecuencia de la noticia.
La noticia aún no cumplía 24 horas y ya cientos de personas, especialmente mujeres, llegaron hasta el edificio donde fue encontrado el cuerpo de la menor. En el lugar encienden velas y, además de flores, también llevan carteles exigiendo justicia por el crimen. Hacia el mediodía la clínica emite un parte en el que confirma la identidad del sospechoso, de 38 años de edad, quien además fue tratado por sobredosis, versión que rechazan familiares del internado.
Las protestas
Así como llegaron al edificio, la comunidad arribó hasta la clínica exigiendo justicia al mismo tiempo que los padres de la menor interponen una demanda formal por feminicidio agravado. Ante los avances hechos, las autoridades realizan una inspección a la camioneta donde habría sido secuestrada Yuliana Samboní.
Así como en el edificio Equus y la Clínica Cardiovascular, la comunidad se volcó hasta el parque Lourdes de Bogotá para realizar una jornada de protesta en contra de los feminicidios, especialmente el de la menor. A este lugar, hacía las 6:00 de la tarde, llegó el padre de la infante sumando su voz de clamor por la justicia.
Oficialmente
Por otra parte Néstor Martínez, fiscal general, y Carlos Valdés, director de Medicina Legal, aseguraron que el cuerpo de la pequeña fue objeto de abuso sexual, pero que la causa de la muerte se debió a una asfixia mecánica, por sofocación y estrangulamiento, agregando que la escena del crimen habría sido alterada por terceros, que con el pasar de las horas fueron incluidos en la investigación del crimen.
Por otra parte, los investigadores del caso manifestaron que aunque el lugar de los hechos sufrió de alteración, se han rescatado restos de ADN que han permitido establecer posibles indicios. Tanto en la escena del crimen como el cuerpo de la menor, según los agentes del Gaula, habrían intentado borrar posibles pruebas que comprometieron al implicado inicial.
Esa misma noche, a modo de respuesta, la familia del presunto asesino emite un comunicado en el que ‘oficializan’ la responsabilidad de Rafael, asegurando que éste deberá “asumir las drásticas consecuencias que se desprenden de su inexplicable actuar”, cita el documento.
Capturado
No pasan más de cinco horas cuando Rafael Uribe Noguera, aún internado, es notificado por la Policía sobre su orden de captura por los delitos de feminicidio agravado, secuestro simple y acceso carnal violento, además de tortura.
Hacia la 1:00 de la tarde, pero del martes, la Fiscalía decide abrir investigación formal contra los hermanos de Rafael, Francisco y Catalina, por la presunta participación del atroz crimen, específicamente en la alteración del mismo, de comprobarse esta hecho, los implicados podrían pagar condenas entre 8 y 16 años de prisión.
El traslado
El martes en la tarde continúan las protestas frente a la clínica donde se encuentra internado Rafael Uribe, quienes a la espera de su salida, gritan arengan reclamando justicia. Horas más tarde el implicado es trasladado a los juzgados de Paloquemado en medio de un fuerte operativo de seguridad.
A su salida, quienes allí se encontraban le expresan su más profundo desprecio al punto de intentar agredirlo con objetos lanzados contra su humanidad.
Familiares manifestaron que esa misma noche, recibieron los restos de la menor, velada en una funeraria en medio de una multitudinaria compañía; así como se estableció que el Juez 79 de control de garantías, a esa hora, legalizaba la captura de Rafael Uribe, siendo trasladado a primeras horas del miércoles a la cárcel Modelo de Bogotá.
Ese mismo día, además de mantenerse en las celdas de la Sijín al implicado por razones de seguridad, es aplazada la audiencia contra los hermanos Uribe Noguera. También es trasladado el cuerpo de Yuliana Andrea Samboní hacia Popayán, siendo recibido en medio de honores y decretándose tres días de duelo en el departamento por el hecho.
El sepelio
La menor de 7 años, que fue recibida por una abrumada comunidad de la vereda El Tambo, en zona rural de Bolívar, sur del Cauca, fue enterrada luego de ser acompañada durante todo el trayecto. Antes del solemne recorrido la comunidad, junto con otras veredas aledañas, brindaron una misa en honor a su memoria.
“Como pueblo bolivarense despedimos a la hija de un campesino, a una niña de nuestro territorio, a un angelito que está ya en el cielo, que por esa violencia cruel de las ciudades se trunca una existencia llena de sueños, de esperanza”, señaló el presidente de la Junta de Acción Comunal de Los Milagros, Einer Zúñiga Caicedo.
Suicidio
Otro tinte ha tomado la investigación luego de conocerse en las últimas 24 horas sobre el aparente suicidio de quien sería el guardia de seguridad en el edificio Equus 66 en momentos en los que tanto el victimario como los hermanos de éste “analizaban” lo cometido.
Fernando Merchán fue hallado sin vida al interior de su vivienda en un conjunto residencial de la localidad de Kennedy por su hija. Las primeras versiones indicarían que el hombre, quien ya había sido entrevistado por la Fiscalía por el caso, tomó la decisión de acabar con su vida siendo aún una incógnita las razones de la decisión.
De igual forma, se estableció que el occiso dejó una breve carta en la que pide disculpas a su familia. “hijitas perdónenme, a María y demás amigos y familiares, pero no quiero volver a la cárcel. No quiero dañarle la Navidad. Soy. Inocente”, apuntó Merchán en su despedida.
Más dudas
Asimismo se estableció que el guardia apuntó en la minuta del edifico, el día de los hechos el ingreso de los hermanos de Rafael, pero apuntando además que el apartamento estaba solo.
Las investigaciones continúan, todo el edificio está siendo inspeccionado con la ayuda de expertos estadounidenses en el tema. A su vez, el fiscal mencionó que no descartan ninguna teoría: Suicidio u homicidio.
